domingo, 10 de agosto de 2008

A proa de olvidos



Encallado o anclado, extendiendose sobre el final de Caminito. Pieza de desidia
frente a lo típico. El tango arrabalero, la Boca maradoniana, el mate grabado, la foto dígital, el turista gringo, la artesania dolarizada, las chapas coloreadas. No hay correntadas que lo balanceen, que provoquen el mareo del principiante. Se deja besar por la viscosidad negra que alguna vez fue agua. Barco de pasajeros ausentes, barco de cargas históricas. Con significantes adheridos como los mejillones al muelle.
Las aguas, espejo de magia negra, reflejo de lodo tóxico, donde no es posible nadar. Sobre ellas, él, que, habiendolas recorrido, no le es posible callar.
En la proa se delinea el nombre, Nicolas Mihanovich, en el frente se delimita su función, Vapor de la carrera.
La desmantelación de su carga de significados surge en pares. Dos escritores subieron en él, dos cuentos de ellos lo mencionaron ( misteriosamente se parecían), dos tragedias tuvo, dos ciudades conectaba.
Nicolas Mihanovich vinó de Dolí (Imperio Austro-hungaro, hoy Croacia) en 1861, fue uno de los iniciadores de la navegación mercante en Sudamérica. El primero en establecer la linea comercial y de pasajeros entre Buenos Aires y Montevideo. Surgió con él, el vapor de la carrera. Un serie de barcos que conectaba ambas ciudades en doce horas (diez de la noche salía del puerto y llegaba a Montevideo por la mañana). Luego la empresa pasó al grupo Dodero (su yerno), con Perón se estatizó bajo el nombre de Flota Argentina de navegación fluvial, y en la dictadura, se "vendieron" la mayor parte de los vapores que aún existian.
Ferrylineas se quedó con el Nicolas Mihánovich. El nombre fue el homenaje que le hizo el estado a uno de los pioneros en comercio marítimo.
Construido en Argentina en 1962, hizo la ruta desde 1981 hasta mediados de los 90. Antes de él, hubo otros barcos, otras historias:

-En 1956 Cortazar escribió La puerta condenada, allí, Petrone, un viajante de comercio, se tomaba el vapor de la carrera hacia Montevideo donde viviría extraños acontecimientos.
-En 1962 Bioy escribió El viaje o el mago inmortal, allí, el personaje (viajante de comercio), en primera persona, contaba su viaje en el Vapor de la Carrera y luego otras circunstancias extrañas que le sucederían en Montevideo.

Y ahí estuvo el Vapor, mucho antes que los aliscafos, los seacat, los Elaida Isabel, llevando historias, escritores. Abriendo las aguas de fantasias, misterios, de destinos encontrados, de desconocimientos mutuos y casualidades misticas.

-Un año despues de La puerta condenada, el 27 de Agosto de 1957, el Ciudad de Buenos Aires, Vapor de la carrera que estaba en viaje a Rosario, se hundió en el Delta, murieron 74 personas.

-Un año después de El viaje o el mago inmortal, el 10 de Julio de 1963, el ciudad de Asunción (el segundo vapor de la carrera) se hundió cerca al puerto de Montevideo, allí murieron 52 personas.

Ambos barcos se supieron realizados, habian ya impulsado los motores de la creación en dos de los mas grandes escritores. Tras un año de la publicación preferieron recostarse en un rio tan vasto y curioso como el de la Plata, ahogando allí las huellas de su gloria, antes que someterse a la pintoresca postal turística del Nicolás Mihanovich, que silencioso, observa la evolución de las camaras digitales japonesas, los bermudas con medias y sandalias de los yankis, las caras enrojecidas de los alemanes, los canticos de una hinchada fervorosa, las casas de paletas de acuarela.
Ningún Petrone subirá más en él.

1 comentario:

p dijo...

quizá en sus pasillos se escuchen aún los pasos de viajantes, se perciban los rumores temerosos de los vírgenes de altamar. quizá, si algún petrone tardío sube apuradamente su equipaje, zarpe el nicolás mihanovich para nunca más volver.